lunes, 3 de abril de 2017

" BALADA DE VERANO CON MARINA AL FONDO" III


IMAGEN TOMADA DE INTERNET

Hay caracolas huecas, en la orilla.
Parecen un latido de la sangre
que vierte el sol poniente.
Granates lenguas visten la ribera
de espumas laceradas por las algas.

La brisa está jugando
a posar abandonos musicales,
sobre  sus laberintos
de madreperla y muerte,
reverberando sones de lo que ya no existe
y canta, en vendavales atrapados
por esas caracolas de la orilla.

domingo, 12 de marzo de 2017

EL QUETZAL Y LA JUNGLA , FRAGMENTO

    Imagen tomada de Internet

                     EL QUETZAL Y LA JUNGLA,
                                                 I

Sobre las ramas del manglar,
las gotas son espejos de la luna.
Feraz muralla
de sombras enlazadas que bordean
un camino surcado por mapaches.

Bajo el agreste cielo
prendemos tus deseos en pabilos,
sobre estrellas de lágrimas candentes,
allá donde se acunan lluvias
de estrellas fugaces en agosto.

Nos miran los mapaches
con su antifaz de sombras,
pequeños bandoleros en la noche.
Les pido que se lleven cuanto quieran,
pero nunca nos roben los recuerdos.

viernes, 3 de marzo de 2017

Exterior de la tumba de La Reina Roja, en Palenque Chiapas

X

Conmueve descubrir la soledad
que habita las piedras de tu tumba,
prendida en la humedad de las paredes,
pintadas de cinabrio, Reina Roja.

Quizá Pakal besó tu último suspiro,
antes de derramar todas sus lágrimas
al sellar esa entrada del sepulcro
que violaron los hombres, tras el tiempo.

Me despido de ti, mi reina amada,
mientras pienso en secretos que perviven,
flotando sobre el mundo de Palenque...

No sé cómo llamar a esos guardianes
que siguen junto a ti, celando un sueño.

lunes, 27 de febrero de 2017

EL QUETZAL Y LA JUNGLA

XVI

Los tzotziles ofrecen mercancías,
multicolor bullicio bajo toldos
de  artistas y artesanos
que van tallando sueños sobre piedras,
talismanes de ámbar,
dioses de jade y obsidiana.
Sus frutas son jugosas y deslumbran
como retazos vivos de su esfuerzo.

Sus niños brincan, sobre orillas quietas,
y remansan sonrisas con sus saltos.
Ellos son el futuro. Y no lo saben.
Juegan como criaturas de la jungla
que llevan en sus venas esa fuerza
de ancestrales guerreros.
Quizás, mañana,
un vuelo de quetzal será su guía.

viernes, 24 de febrero de 2017

IMÁGENES DE MÉXICO

Imagen tomada de Internet, Cenote de los Dos Ojos


La tierra extiende un cuenco de calizas
para ofrecer el agua en los cenotes,
como vasos de dioses y de jungla,
donde sacia su sed el caminante,
junto a reflejos de astros y de siglos
que anudan la belleza a sus raíces.

Sumergirse en las ondas de un cenote
es latir con los dioses de la lluvia,
adentrarse en un rito de cristales,
bajo ese hechizo ineludible
donde la luz se funde con la sombra,
creando un sortilegio de crisoles. 

En su hondura, la vida te contempla,
desflorando secretos y milenios
vertidos por Chaac sobre sus aguas,
para dejar, entre tus poros,

un fulgor de misterio  con su magia.

jueves, 23 de febrero de 2017

Unas palabras grabadas en Casa de América, en Madrid, el día de la presentación del libro" Bajo la estrella el viento", treinta y cuatro mujeres poetas de las Dos Orillas, una obra que une voces poéticas de América y España, en la que fui una de las tres coordinadoras de la Editorial Huerga y Fierro, junto a Milagros Salvador y Antonieta García de León.


Y aquí una pequeña obra de arte realizada por Antena Blue, sobre mi libro "Raíces en las brumas", editado por Lastura:
Después de tanto tiempo, han ocurrido muchas cosas.
Una de ellas fue ésta:

domingo, 12 de julio de 2015

CONTRASTES

Imagen de Internet


CONTRASTES
Habría que revivir lo inenarrable
para poder contarte lo vivido:
los dolores plegados como lienzos
en los estantes de mi almario,
los cercos salobres de unas lágrimas
sobre pañuelos desgastados,
los paraguas carentes de varillas
que nunca cobijaron de tormentas,
los marcos de unas fotos que no existen
veladas por viejos desafectos,
las medias perforadas por abusos,
los guantes desgastados por la espera
nacida de unas manos solitarias,
los vestidos comidos por gusanos
que fueron mariposas hace tiempo.

Habría que revivir lo inenarrable
para poder contarte lo vivido:
el sol que se colaba sobre el alma
cuando abría los postigos de mis sueños,
las risas de unos niños engendrados
por dentro de mi entraña y mis quimeras,
los libros que llenaron soledades
y salvaron la psiquis de delirios,
los árboles plantados que enraizaron
donde no arraigaron mis raíces,
los vuelos que sembraron de horizontes
la celda en que quisieron confinarme,
las páginas escritas a hurtadillas
con tinta clandestina y trazos negros

de unos versos trenzados en poemas.