viernes, 22 de julio de 2011

MA SOLITUDE, DE GEORGE MOUSTAKI





Hacía tiempo que no traía a mi blog una canción, me gusta compartir algunas de mis favoritas, así que me tomo unas vacaciones literarias y os voy a ir dejando unas cuantas de las que me han acompañado a lo largo de la vida.
Llevo una temporada escuchando canciones en francés, la verdad es que estoy perdiendo el vocabulario y mi acento cada vez es más... digamos que españolizado y con tintes pied-noire.
George Moustaki fue uno de mis amores imposibles, me gustaba todo lo que escuchaba de él, sus letras, sus músicas, incluso sus escasas versiones de otros autores, sin olvidar sus ojos y su aspecto tan romántico y bohemio. Así que, desde hace una temporada, ante el hecho de que hace varios años que no he viajado a Francia, he vuelto a su voz y a intentar recuperar algo de lo perdido.
Mi blanco enamoramiento de Mostaki comenzó cuando en un cumpleaños, ya muy lejano- todavía iba al colegio-, alguien me regaló su disco Le Métèque, creo que directamente desde nuestro país vecino. De este maravilloso LP, escuché tantas veces su canción, La Solitude, que acabé por dañarla, ahora pienso que debió de ser una especie de premonición, ma solitud se repetía hasta el infinito... ay, mi soledad.
Del mismo disco, cuya traducción es "El Extranjero" -como ya sabéis-, también me entusiasmaban todas las demás canciones. Seguro que traeré por aquí alguna más.
En fin, que aquí os dejo esta pequeña muestra de mi querido George, que en realidad se llama Yussef Mustacchi y es de origen griego, aunque nacido nacido en Alejandría, Egipto. Hasta eso me gustaba de él, que hubiese nacido en el norte de África, a orillas de ese mar Mediterráneo- como yo-, que es cuna y vehículo de tantas culturas y civilizaciones, aunque él tuvo más suerte todavía, porque además del agua salada tuvo la dulce del Delta del Nilo. Qué mezcla tan maravillosa, el río más largo y el mar más rodeado de tierra y más lleno de historia...


Pour avoir si souvent dormi
avec ma solitude.
Je m'en suis fait presqu'une amie
une douce habitude
elle ne me quitte pas d'un pas
fidèle comme une ombre.
Elle m'a suivi ça et là
aux quatre coins du monde.

Non, je ne suis jamais seul
avec ma solitude.

Quand elle est au creux de mon lit
elle prend toute la place
et nous passons de longues nuits
tous les deux face à face.
Je ne sais vraiment pas jusqu'où
ira cette complice
faudra-t-il que j'y prenne goût
ou que je réagisse?

Non, je ne suis jamais seul
avec ma solitude.

Par elle, j'ai autant appris
que j'ai versé de larmes
si parfois je la répudie
jamais elle ne désarme
et si je préfère l'amour
d'une autre courtisane
elle sera à mon dernier jour
ma dernière compagne

Non, je ne suis jamais seul
avec ma solitude.
Non, je ne suis jamais seul
avec ma solitude.


7 comentarios:

catherine dijo...

C'est une très belle chanson, una canción muy bella como todas las de Moustaki. Me doy cuenta que repito lo dicho por ti, podría repetirlo todo.
Tuve muchos amigos pieds-noirs. Me encantará oír este acento de nuevo.
Plein de bises, María.

Isolda Wagner dijo...

Ay María, también estabas enamorada de Moustaki. No sabes cuántas veces le he escuchado, tengo todas sus temas, ahora mismo estoy recordando esta canción. "Faudra-t-il que j'y prenne goût ou que je réagisse?"
Besos, querida, del mediterráneo.

Pd.Non, moi non plus...

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, María:

Qué bonita canción, ha sido una suave y agradable compañía para mi soledad, en esta tarde fría.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

No me extraña que escucharas tantas veces esta canción, ni que estuvieras "enamorada"de Moustaki. Es un tema precioso y muy bien contado por la dulce voz del artista.
Me ha encantado, la canción y conocerte más a ti.
Un abrazo.

ANTONIO CAMPILLO dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ANTONIO CAMPILLO dijo...

El mejor comentario que puedo hacer a esta excelente canción es el que su letra expresa: "fiel como una sombra". Mi fidelidad a Moustaki, sus canciones y su música, es absoluta.

Sinceramente, creo que quienes hemos vivido la época dorada de Moustaki y escuchado sus composiciones en discos de vinilo, sí de esos que se rayaban y tostoneaban cuando estaban sucias las finas líneas espirales en donde se escondían la belleza y los sueños, hemos podido disfrutar de algo único: esperar el estreno y escuchar, casi inmediatamente, sus nuevas composiciones.

Ha sido una sorpresa y un inmenso placer recordar esta música, que sigo disfrutando con igual pasión, y esa letra plena de sabias estrofas que nos hacen vibrar como las cuerdas de su eterna guitarra.

Esta publicación, María, es una sabia decisión. Gracias.

Un fuerte abrazo.

María Socorro Luis dijo...

Gracias, María por estos momentos musicales tan maravillosamente agradables.

Y besospormil