lunes, 16 de julio de 2012

SERRAT: ALGO PERSONAL







Hoy siento la emoción haber visto- anoche- que ante las protestas por los recortes que están llevando adelante los funcionarios de muy distintos sectores, las fuerzas de orden público, los anti-disturbios, se quitaron el casco, un gesto recibido con aplausos por parte de la totalidad de los manifestantes. Y es que ellos son funcionarios, como los demás, tan afectados como todos  por la ineficacia política de quienes nos gobiernan y de quienes nos gobernaron. No salvo  a ninguno de los dos grandes partidos. 
Todos somos pueblo, todos somos ciudadanos, todos somos igual de vulnerables y vulnerados, ante el atropello a nuestros derechos y la pésima gestión de la crisis.
Yo no soy economista, pero mi sentido común me dice que al subir el IVA, que es una cadena de impuestos(cuando compramos un vestido el IVA se ha aplicado al tejido, los botones, los hilos, las agujas, alfileres, etc, hasta su confección definitiva) que acompaña a un producto durante varias etapas, hasta que llega a nuestras manos ciudadanas, versus  consumidoras, y que engloba desde los alimentos a la ropa, pasando por la vivienda y el transporte, y, al mismo tiempo,  recortar el poder adquisitivo de todos nosotros, cada vez vamos a tener que ir prescindiendo de más cosas, incluso de las más necesarias, es decir, no vamos a poder comprar nada que no nos resulte absolutamente imprescindible. La consecuencia se irá viendo de forma progresiva, al no haber demanda la oferta aumentará y los precios caerán, hasta arruinar a los productores y empresarios... las cadenas de producción, al no tener demanda para lo que producen, tendrán que ralentizarse hasta parar. Resultado: más paro y menos IVA. Porque si los ciudadanos dejan de comprar, ¿qué es lo que van a gravar con IVA? ¿El aire? Claro que se me olvidaba considerar que al caer los precios, por ejemplo de la vivienda y del suelo urbano, los que siempre han tenido dinero, sí ésos que cuando Rajoy mete la tijera en las entretelas de los más débiles dicen entre aplausos "que se jodan", ésos van a hacer su agosto con la especulación. No sólo comprarán material urbano y urbanizable, van a comprar empresas y fábricas, a precios de risa para ellos y de llanto para los demás. Sólo es cuestión de tiempo, de poco tiempo.
En fin que confieso que contra esta gente lo que siento  es realmente algo que supera lo colectivo y me lleva hasta lo personal. Sí, lo que siento es, también, algo personal. Y Serrat lo canta y cuenta de maravilla.



ALGO PERSONAL


Probablemente en su pueblo se les recordará
como cachorros de buenas personas,
que hurtaban flores para regalar a su mamá
y daban de comer a las palomas.

Probablemente que todo eso debe ser verdad,
aunque es más turbio cómo y de qué manera
llegaron esos individuos a ser lo que son
ni a quién sirven cuando alzan las banderas.

Hombres de paja que usan la colonia y el honor
para ocultar oscuras intenciones:
tienen doble vida, son sicarios del mal.
Entre esos tipos y yo hay algo personal.

Rodeados de protocolo, comitiva y seguridad,
viajan de incógnito en autos blindados
a sembrar calumnias, a mentir con naturalidad,
a colgar en las escuelas su retrato.

Se gastan más de lo que tienen en coleccionar
espías, listas negras y arsenales;
resulta bochornoso verles fanfarronear
a ver quién es el que la tiene más grande.

Se arman hasta los dientes en el nombre de la paz,
juegan con cosas que no tienen repuesto
y la culpa es del otro si algo les sale mal.
Entre esos tipos y yo hay algo personal.

Y como quien en la cosa, nada tiene que perder.
Pulsan la alarma y rompen las promesas
y en nombre de quien no tienen el gusto de conocer
nos ponen la pistola en la cabeza.

Se agarran de los pelos, pero para no ensuciar
van a cagar a casa de otra gente
y experimentan nuevos métodos de masacrar,
sofisticados y a la vez convincentes.

No conocen ni a su padre cuando pierden el control,
ni recuerdan que en el mundo hay niños.
Nos niegan a todos el pan y la sal.
Entre esos tipos y yo hay algo personal.

Pero, eso sí, los sicarios no pierden ocasión
de declarar públicamente su empeño
en propiciar un diálogo de franca distensión
que les permita hallar un marco previo

que garantice unas premisas mínimas
que faciliten crear los resortes
que impulsen un punto de partida sólido y capaz
de este a oeste y de sur a norte,

donde establecer las bases de un tratado de amistad
que contribuya a poner los cimientos
de una plataforma donde edificar
un hermoso futuro de amor y paz.

viernes, 13 de julio de 2012

AUTE: LA BELLEZA




Cuando escuché por primera vez esta canción de Luis Eduardo Aute, me pareció revolucionaria. Han pasado bastantes años, lo que dice en ella sigue siendo una gran verdad, pero en las actuales circunstancias resulta suave. Ya no hay maquillajes de ocasión, ahora se van desenmascarando, unos y otros, todos los que  nos están llevando al desastre, a la fractura social, sí, todos esos especímenes políticos a los que el pueblo  votó y que, por desgracia, nos gobiernan. Aunque en este momento el pueblo está harto de tanto desatino, de tanta desvergüenza, de tanto banquero mangante y de tanto político, que bien se podría calificar de mangante legalizado, por ir llenando su bolsillo con sueldos desmedidos- por no hablar de las famosas dietas y privilegios-, mientras el pueblo se hunde en la pobreza, y buena parte del mismo ya vislumbra la miseria. La fractura social está servida.
Vamos al desastre más absoluto, los recortes a los más débiles, siempre a los más débiles, en Sanidad y en Enseñanza,  la bajada de las pensiones y la del subsidio de paro,  en un país donde no hay empleo, la bajada de los sueldos de los funcionarios, la supresión de la paga extra- con la que los funcionarios se desentrampaban-, la subida de impuestos a una población que ha visto severamente mermado su poder adquisitivo, la falta de créditos a empresas que, ante la quiebra, no tienen más salida que dejar a sus empleados en la calle... y mientras todo esto acontece, se evaden- y se evadieron- a paraísos fiscales, capitales de empresarios vinculados a familias intocables, e incluso alguno despilfarró- y probablemente seguirá despilfarrando, a la primera de cambio-  una fortuna en cacerías de especies protegidas- en otros continentes-, sin que parezca que se les remueva nada en la conciencia, aunque, eso sí, saben hacer buenas llamadas a nuestro común y patrio espíritu de sacrificio, aún  cuando saben que a los inmigrantes se les va a denegar la asistencia médica, si  no tienen papeles o llevan demasiado tiempo en paro, y a nuestros jubilados,  todos ellos con escasos recursos económicos, les cobran ya las medicinas y los desplazamientos para tratamientos como, por ejemplo, la hemodiálisis. Y, por añadidura, nuestros ancianos enfermos -Alzheimer, enfermedades óseas y/o musculares degenerativas, etc.- están dejando  de percibir el apoyo económico preciso para su  necesaria asistencia, no sólo en centros especializados sino también en el núcleo familiar, pese a todo lo que  hayan cotizado a lo largo de sus vidas... 
No, hoy no estoy para escribir poesía, ni tan siquiera me nace un poema de denuncia social, ni estoy cuidando el estilo de lo que digo, porque hoy se me ha hundido la belleza en el asfalto de esta urbe en la que, cuando el pueblo protesta- por ejemplo hace dos días, con el apoyo de Madrid a los mineros- los que mandan envían a los funcionarios de orden público- tan perjudicados por los recortes, las subidas de impuestos y la ineficacia política como quienes protestan- contra los que alzan su voz y su indignación por todo lo que está pasando. Pueblo contra pueblo, damnificados contra damnificados...y ellos, los que mandan, con sus traseros bien asentados en el poder, contemplando como el pueblo se lía a hostias, sabiendo que los que la han liado son ellos, los bien pagados, los impunes, los políticos de todo pelaje...
Para terminar diré que leí una pintada, en un vídeo, que decía así: "Nos mean encima y la prensa dice que llueve". Hagamos algo que frene esta locura, tan aplaudida por Europa. HAGAMOS ALGO.

LA BELLEZA

Enemigo de la guerra 
y su reverso, la medalla 
no propuse otra batalla 
que librar al corazón 
de ponerse cuerpo a tierra 
bajo el paso de una historia 
que iba a alzar hasta la gloria 
el poder de la razón 
y ahora que ya no hay trincheras 
el combate es la escalera 
y el que trepe a lo mas alto 
pondrá a salvo su cabeza 
Aunque se hunda en el asfalto 
la belleza... 

Míralos, como reptiles, 
al acecho de la presa, 
negociando en cada mesa 
maquillajes de ocasión; 
siguen todos los raíles 
que conduzcan a la cumbre, 
locos por que nos deslumbre 
su parásita ambición. 
Antes iban de profetas 
y ahora el éxito es su meta; 
mercaderes, traficantes, 
mas que nausea dan tristeza, 
no rozaron ni un instante 
la belleza... 

Y me hablaron de futuros 
fraternales, solidarios, 
donde todo lo falsario 
acabaría en el pilón. 
Y ahora que se cae el muro 
ya no somos tan iguales, 
tanto vendes, tanto vales, 
¡viva la revolución! 
Reivindico el espejismo 
de intentar ser uno mismo, 
ese viaje hacia la nada 
que consiste en la certeza 
de encontrar en tu mirada 
la belleza…

sábado, 7 de julio de 2012

MARÍA SANGÜESA: PAISAJES


 












IMAGEN TOMADA DE INTERNET



PAISAJES

Hay paisajes, perdidos en el tiempo,
nos habitan la memoria
en vívidas estampas de recuerdos.
Guardamos en los arcos de la mente
sus aromas de vida.
Aún nos deslumbra
la luz que nos dejaron en los pasos,
y nos arrastra
el agua que borraba nuestras huellas
o el viento que incendiaba sus sonidos.

Hay paisajes, perdidos en el tiempo,
traen lluvias de palabras
y van tallando letras sobre estrofas
para esculpir los versos
olvidados en alguna breña del camino
o en la silente duna de una playa.
Nos brotan manantiales de las manos,
arroyos de tinta sobre hojas,
resurgida memoria en vivas líneas…
Revelación de horizontes en poemas.

martes, 3 de julio de 2012

SILVIO RODRÍGUEZ, ÁNGEL PARA UN FINAL



Hay luna llena, o casi llena, una luna de ésas que inundan la noche de misterio, de magia, de sueños y ensueños, de nostalgia...
Una luna de aquelarres, o de licántropos. Una luna que reina en la noche que se derrama por las calles de Madrid, por sus parques, por sus plazas. Una noche que parece propicia para los hechizos y los sortilegios, con la ciudad envuelta en la atmósfera irreal del manto de Selene. Una noche en la que parecen cercanos los ángeles, todos los ángeles, casi se pueden sentir sus alas, las de luz y las de sombra...
Mientras escribo, suena la música, Silvio canta esta canción y me entra frío en el alma, pese al calor de esta noche de verano es evidente que me recorre la espalda un escalofrío y noto que se me humedecen los ojos. A veces, como está ocurriendo ahora,  parece que Silvio canta sólo para mí, pero en esta ocasión siento que de todos los ángeles que pueblan mi  madrileña noche de plenilunio, me está dejando en compañía del ángel de su canción, un ángel que quisiera rechazar pero que se queda conmigo porque la belleza- quizá la tristeza- de su música y, también, de su letra me tienen tan atrapada que no puedo decirle adiós. Y lloro.


ÁNGEL PARA UN FINAL 


Cuentan que cuando un silencio 
aparecía entre dos 
era que pasaba un ángel 
que les robaba la voz. 
Y hubo tal silencio el día 
que nos tocaba olvidar 
que de tal suerte yo todavía 
no terminé de callar. 
Todo empezó en la sorpresa 
en un encuentro casual 
pero la noche es traviesa 
cuando se teje el azar 
sin querer se hace una ofrenda 
que pacta con el dolor 
o pasa un ángel 
se hace leyenda 
y se convierte en amor. 
Ahora comprendo 
cual era el ángel 
que entre nosotros pasó 
era el más terrible, el implacable 
el más feroz. 
Ahora comprendo en total 
este silencio mortal 
ángel que pasa 
besa y te abraza 
ángel para un final. 

SILVIO RODRÍGUEZ

lunes, 2 de julio de 2012

MARÍA SANGÜESA: UVAS NEGRAS


UVAS NEGRAS


Zarcillos de ira en uvas negras,
dolores constreñidos a racimos
ocultos bajo pámpanos en viñas.
Oscuras soledades de los campos
dormidos, bajo soles desmembrados,
entre arcanos latidos, roja greda.
Hoy exprimen el zumo de los cielos
secas tierras de enraizada avaricia,
la lluvia derramada mañana será vino
y sueño los racimos que miramos.

Se encabritan raspones en las uvas
-de efímera existencia-,
presienten futuros de vendimia, estallidos
de ahogo entre lagares, letargo en roble…
Transmutación del jugo en mosto
y vino en sangre.
Como un sagrado rito beberemos
-en comunión de ira- sus dolores.
Vestiremos de risas los racimos
para agotar de un trago
las negras soledades de sus uvas.