lunes, 14 de febrero de 2011

UNO DE MIS POEMAS PUBLICADOS EN ALKAID nº 10


Aquí tenéis uno de mis poemas publicados en Alkaid. Se lo dediqué a mi madre, es pintora, sus exposiciones fueron numerosas. El Arte fue su vida, ahora tiene Alzheimer, ha perdido sus recuerdos y vive en una realidad paralela, aún así sigue siendo capaz de dibujar. El dibujo que acompaña esta entrada lo hizo hace siete meses, le estuve leyendo algunos poemas de Juegos de Sirena, me pidió un bolígrafo y éste fue el resultado. Por supuesto, no aparece en la revista pero creo que es el más adecuado para ilustrar la entrada de hoy.

ENTRE LAS NIEBLAS

Madre, te vas perdiendo entre las nieblas

que van borrando sueños y recuerdos…

Evocas a una niña que lloraba

y no miras a esta mujer que sangra.


No existen calendarios en tu mente,

sus hojas se fundieron en el tiempo

que va volando libre en tu memoria,

huidizo humo de hogueras en la arena.


Ya nada es ayer ni hoy, tan sólo vida

que escapa en fuga de alas de gaviota

por rumbos imprecisos e inestables.


Tenues fibras de aire y de pasado

dibujan espirales, laberintos,

entre confusos y difusos lienzos

superpuestos en velos intangibles,


que enredan tus paisajes de amplios cielos

y alborotan los estuarios de tu alma,

mientras nublan miradas y palabras…


Mas aún queda en ti un esplendor de luces

en ese amor que habita entre tus manos

cuando trazas caricias en mi frente.

10 comentarios:

Paloma Corrales dijo...

María, me gusta el dibujo de tu madre y que tus poemas la regresaran a la pintura que ha sido tanto para ella, ¿puede haber más bella comunicación que la que se establece sensorialmente a través del arte?.

El poema emotivo y entrañable.

Besazo.

Beatriz Ruiz dijo...

Mi querida amiga...

Tienes una capacidad impresionante para escribir tus sentimientos, y te admiro por ello...

Me ha gustado mucho el dibujo, os imagino...

Besos...

Unknown dijo...

No podías haber ilustrado mejor tu poema, María, no podías describir mejor lo que se siente, lo que se vivo, no podías conmoverme más ni en otro modo.
Poema visceral y lirico en un tiempo que se me clava y me desangra:
"Ya nada es ayer ni hoy, tan sólo vida..."

Creo que tampoco podías describir mejor lo que te une con ese ser maravilloso que aun te pinta.
Me encantó.
Un abrazo fuerte, muy fuerte.
Leo

ANTONIO CAMPILLO dijo...

Unir el tiempo en direcciones paralelas y hacer que vuele sobre el pájaro de la memoria debe ser la irrealidad encontrada.
Sentir la caricia del ser amado, aunque se encuentre muy lejos, es sentir el amor.
Atrapar amor y dolor en la sutil red de la sensibilidad dibujada en un poema es fundir almas.
Agradecer lo que nos muestras con tu sensibilidad es indispensable.

Amando Carabias dijo...

Emocionante todo, el dibujo, el poema, donde los afectos son más hondos, si es posible, marcándose en el ritmo endecasílabo del verso.
No es difícil imaginaros a las dos, tú leyendo con es voz que Dios te ha regalado y tu madre sintiendo las palabras de ese libro, esa sirena recorriendo mares y playas disfrutando y sufriendo con el amor...

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, María:

"Cuando trazas caricias en mi frente"... Es un poema muy bello.

El dibujo denota lo talentosa que fue y sigue siendo tu querida madre.

Abrazos.

María Socorro Luis dijo...

Qué tierno, entrañable, qué dulce tristeza... Puritito sentimiento.

Tu poema araña por dentro, permanece, se hace caricia y desconsuelo.

Te acompaño y te abrazo.

Juana Castillo dijo...

¡Qué poema tan hermoso, María! Y, en cuanto al dibujo de tu madre... ¿Qué decir? Parece mentira que estando con Alzheimer aún consiga, por medio del arte, dar vida a los poemas que le lees. ¡Para que luego digan que la mente está "muerta".
Bueno, después de este comentario vine a decirte que "de nada" por la publicación del encuentro poético. Lo que importa es que todo fuera bien.
Decirte también, no casi es preciso que insista en ello, que tienes abiertos el blog del taller literario para lo que gustes; así como la revista (que envío en formato pdf cada dos meses).
Un abrazo, Juana.

Isolda Wagner dijo...

Qué poema tan delicado, María. Sabes que me llega muy especiamente. Admirable tu madre que sabe aún cómo dibujarte!
Besos como de sirenas.

Maria Sangüesa dijo...

Gracias, amigos, me habéis emocionado con vuestras palabras. Voy a estar fuera dos días, a mi regreso me gustaría responderos de uno en uno. Un abrazo muy fuerte para todos.